Si usted ha visto noticias últimamente sobre los vendedores de casas que están rebajando los precios, esto es un gran ejemplo de cómo los titulares hacen más para aterrorizar que para aclarar. Esto es lo que realmente está sucediendo con los precios.
La conclusión es que los precios de las casas son más altos en comparación con el año pasado por estas mismas fechas, y se espera que sigan aumentando, solo que a un ritmo más lento.
Pero un artículo reciente de Redfin señala:
“Las caídas de los precios alcanzan el nivel más alto en 18 meses a medida que las tasas altas reducen la demanda de los compradores”.
Y eso podría hacer que usted piense que los precios están bajando.
Ahora, si bien es cierto que el último informe de Realtor.com también muestra que el 16,6 % de las casas en el mercado tuvieron una reducción de los precios en mayo, lo que representa un aumento del 12,7 % en comparación con mayo del año pasado, eso no significa que los precios generales de las casas estén cayendo.
La clave es conocer la diferencia entre el precio que se pide y el precio final de venta
En esencia, el precio de venta, también conocido como precio que se pide, es la cantidad que un vendedor espera obtener por su casa cuando la pone para la venta. En realidad, los vendedores no pueden simplemente ponerle cualquier precio a su casa y esperar que se venda al precio más alto. Los compradores de hoy son clientes inteligentes, y cuando no están dispuestos a pagar un precio muy alto por una casa porque sus presupuestos se ven afectados por las tasas hipotecarias altas, los vendedores deben adaptarse. Y eso es lo que está sucediendo en este momento.
Basado en los factores del mercado y de las ofertas que reciba el vendedor, ese precio de venta puede cambiar. Si un vendedor no está recibiendo mucho tráfico peatonal, es posible que usted los vea revisar el precio y hacer un ajuste para reavivar el interés en la casa, y a veces eso se debe a que la han sobrevalorado desde el principio. Ahí es donde entran en juego las reducciones de los precios, y cuando usted vea “caídas de los precios” en un titular, suena como una disminución de los precios de las casas.
Mike Simonsen, CEO y fundador de Altos Research, dice:
“No solo la cantidad de casas con recortes de precios es elevada en comparación con el año pasado, sino que cada semana se producen más recortes de los precios en comparación con el año pasado”.
Por otro lado, el precio final de venta es la cantidad que un comprador realmente paga cuando se completa la transacción.
Esto es lo más importante a tener en cuenta: los precios reales de venta siguen aumentando, y se espera que continúen haciéndolo al menos durante los próximos 5 años.
Por lo tanto, si bien ha habido un aumento en las reducciones de los precios recientemente, esto no significa que el valor en general de las casas esté disminuyendo. En cambio, es una señal de que la demanda se está moderando. Y, como resultado, los vendedores están ajustando sus expectativas para alinearse con la realidad actual del mercado.
Incluso con más reducciones de los precios, el valor de las casas sigue aumentando anualmente, como lo hacen casi todos los años en el mercado de la vivienda. Según la Agencia Federal de Financiamiento de la Vivienda (FHFA, por sus siglas en inglés), los precios de las casas aumentaron un 6,6% durante el último año (vea la gráfica):
Este mapa muestra cómo los precios subieron en casi todo el país, lo que indica que el mercado no está en declive.
Por lo tanto, si bien las reducciones de los precios de los vendedores suelen ser un indicador adelantado de que los precios pueden moderarse en los próximos meses, lo que los expertos han estado diciendo durante algún tiempo que se espera que suceda, no son necesariamente motivo de alarma. El mismo artículo de Redfin también afirma:
“… Esas métricas sugieren que el aumento de los precios de venta podría moderarse en los próximos meses a medida que las tasas hipotecarias persistentemente altas desaniman a los compradores de casas. Por ahora, el precio medio para la venta de una casa ha subido un 4,3 % año tras año hasta alcanzar otro récor…”
Y con el inventario tan limitado como lo está hoy, es mucho más probable que se moderen los precios en los próximos meses y que no caigan los precios.
Para los compradores, los precios para la venta más realistas significan una mejor oportunidad de asegurar una casa a un precio justo. También significa que puede ingresar al mercado con más confianza, sabiendo que los precios se están estabilizando en lugar de seguir disparándose.
Para los vendedores, comprender la necesidad de ajustar el precio para la venta puede conducir a ventas más rápidas y menos negociaciones de los precios. Establecer un precio realista desde el principio puede atraer a compradores más serios y conducir a transacciones más fluidas.
Si bien el aumento en las reducciones de los precios puede parecer preocupante, esto no es motivo de preocupación. Esto refleja un mercado que se está ajustando a las nuevas condiciones. Los precios de las casas siguen aumentando solo que a un ritmo más moderado.